El lunes 12 de diciembre a partir de las 20:00 hs. en el Club Social, se realizara el evento: Irrupción cultural, una oportunidad para charlar con Alejandro Piscitelli sobre los procesos culturales que están cambiando al mundo. Este filosofo experto en nuevos medios, es un referente de reconocimiento internacional en lo que se refiere a este tema, y este año tenemos la oportunidad de traerlo por segunda vez a la provincia para que nuestra comunidad pueda debatir con el los temas que lo convocan a disertar con frecuencia en el exterior.
La entrada es libre y gratuita
Alejandro Piscitelli, es Lic. en Filosofía de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y magíster en Ciencias de Sistemas de la Universidad de Louisville (EE .UU.) y la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO). Es profesor titular del Taller de Procesamiento de Datos, Telemática e Informática de la carrera de Ciencias de la Comunicación de la UBA y consultor organizacional en comunicación digital e Internet. Es autor de libros como El Paréntesis de Gutemberg La religión digital en la era de las pantalla ubicuas , El proyecto Facebook y la posuniversidad, 1@1 Derivas en la educación digital, Nativos Digitales. Dieta cognitiva, inteligencia colectiva y arquitecturas de la participación, Internet: la imprenta del siglo XXI, Meta-cultura. El eclipse de los medios masivos en la era de Internet; Ciberculturas 2.0. En la era de las máquinas inteligentes; La generación Nasdaq. Apogeo ¿y derrumbe? de la economía digital; Post-Televisión. Ecología de los medios en la era de Internet; (Des)haciendo ciencia. Conocimiento, creencias y cultura, entre otros. Se desempeña como docente de cursos de posgrado en la UBA, FLACSO, Universidad de San Andrés y otras varias universidades argentinas, latinoamericanas y españolas. Es, demás, coeditor del diario electrónico Interlink Headline News (http://www.ilhn.com/blog/) desde 1995. Fue gerente general de educ.ar portal educativo de la Nación Argentina, y presidente de EDUTIC, Asociación de Entidades de Educación a Distancia y Tecnologías Educativas de la República Argentina. Se desempeñó como secretario adjunto del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO), subsecretario académico de la carrera de Sociología (UBA) y asesor de la Secretaría de la Función Pública de la Presidencia de la Nación Argentina.
Una aproximación sobre los temas que charlaremos:
El problema de entender la relación sociedad tecnología-cultura, es decir la tecnocultura, es que, bajo la influencia de las nuevas tecnologias, están ocurriendo muchos procesos simultáneamente, superponiéndose unos con otros. Pero carecemos de las categorías para comprenderlos y sacarles el máximo rendimiento. Hay un desfase de tiempo y conceptos para entender qué está pasando.
Eso lleva a que, en general, en los centros políticos se considere la tecnología como un dato y se participe, sabiéndolo o no, de la ideología tecno-determinista pero sin planes de acción bien planificados.
Internet es la imprenta de nuestro tiempo. El quid de la cuestión es, como ya insistía Heinz Von Foerster hace más de medio siglo, que “no vemos que no vemos”. Necesitamos comprender el uso de estas herramientas intelectuales: algunas son computacionales, otras modelos de simulación, otras son teorías multidimensionales, multicausales; y en otras necesitan herramientas como las que propone J.C.Dursteller, modelos de visualización. Y sobre todo, hay que comprender lo que empezó a hacer Albert Lazlo-Barabasi: la redología, saber cómo se forman los modelos de redes.
Y ahora de lo que está emergiendo en los últimos 20 años lo interesante es la aparición de esa llamada Tercera Cultura como planteamiento de superación de esas dos culturas que en la década de los 50 propugnó C. P. Snow: la cultura tecnológica de la producción sin código ético y la cultura humanista con una gran capacidad crítica pero impotente para diseñar y operar. Frente a ello la Tercera Cultura aparece como la alternativa para generar una visión crítica productiva y una construcción consciente y cuidadosa de las consecuencias y de los efectos perversos de la tecnología. La Tercera Cultura supone la superación del dualismo ciencia-productiva, pero no ética, y una ética-humanística crítica pero no productiva económicamente, por tanto, es una cultura productiva ética. Una cultura de raíz tecnológica y científica. Hay que alentar el crecimiento de la Tercera Cultura.
El Parentesis de Gutenberg es una forma de describir un ciclo de 500 años de una cultura letrada, el cierre de esa etapa y un retorno a una segunda oralidad. Mientras que la cultura parentética está dominada por la composición original, individual, autónoma, estable y canónica, la cultura preparentética había estado dominada por los opuestos de estos rasgos. A saber la performance re-creativa, colectiva, contextual, inestable, tradicional, todos términos que probablemente no sean sino otra forma de nombrar o emparentarse con el sampleo, el remix, el préstamo, el rediseño, la apropriación y la recontextualización, propios de la cultura digital interneteana “post-paréntetica”.
Desde el Renacimiento, la comunicación (transmisión) de la cultura occidental ha estado dominada/determinada por textos producidos mecánicamente (es inolvidable la célebre alusión de Marshall McLuhan al libro como a la primera encarnación del fordismo avant la lettre, teniendo en él a su encarnación suprema).
El golpe mortal que Gutenberg quiso asestarle a la cultura oral -esa divisoria sin resto entre medios fríos y calientes, entre sociedades frías y sociedades calientes como sostenía Claude Levi-Strauss en El Totemismo Hoy y en El Pensamiento Salvaje a principios de los años 60)-, visto desde la era interneteana no seria sino un paréntesis que estaría llegando a su fin
El meme “paréntesis” es mas que poderoso y sugestivo, marca claramente un antes, un en medio y un después en el tiempo, revelando sobretodo profundas afinidades, y continuidades materiales y simbólicas entre el antes y el después, y relegando el medio (el “core” de la cultura occidental) a una estación de paso, a una búsqueda de cierre, o a un intento colonizador de las formas disruptivas de la oralidad que habrían sido silenciadas, castigadas y colonizadas del mismo modo que los pueblos autóctonos de la mano de un capitalismo simbólico/depredador que habría tenido en la Imprenta a su agente viral de control
El desafio principal de los cambios que estamos viviendo es de tipo cultural, ya que si bien, aparentemente más homogéneo, este mundo occidental paradójicamente está lleno de heterogeneidades: los inmigrantes, los desvalidos, los infobres, los genodominados, etc. El gran reto es cómo incorporarlos, a qué costo económico y a qué precio político. Es decir, conseguir una política de tolerancia y promoción de la diversidad que ni siquiera se ha logrado todavía en la Unión Europea. La clave es encontrar la fórmula para avanzar en la globalización tecnológica-económica respetando la diversidad político-cultural. La solución pasa por reconstruir la identidad y reforzar la cultura colaborativa.